Japón y religión. Un pequeño esbozo de las creencias en el país del Sol Naciente, por Elena Gómez Vázquez

 

Templo budista de Daigo-ji, Fushimi-ku, Kioto


Japón es conocido, además de por su gastronomía, por su tradición y su gran cantidad de templos o santuarios. Pero actualmente más del 60% de la población japonesa no cree en ninguna religión en particular, sino que algunos siguen rasgos de distintas religiones y otros simplemente se declaran no creyentes ni seguidores de ninguna.

La religión con más practicantes es el budismo, originario de la India. Aunque, si se cuenta el número de personas influenciadas por los dogmas de alguna religión, destacaría el sintoísmo, del cual se hablará más adelante.

El budismo llegó al país en el siglo VI, tras el envío del rey Baekje de Corea de una serie de pinturas de Buda al emperador de Japón. El lugar en donde se empezó a extender fue en Nara, en aquel momento capital de Japón, actualmente capital de la prefectura de Nara. En esta ciudad, se haya uno de los 81.158 templos budistas que hay en el país, el templo Tōdai-ji, dentro se encuentra una estatua gigante de Buda.

Templo Tōdai-ji

La práctica del budismo alberga tres formas de interpretación:

- La primera (Mahāyāna), una rama que tiene un concepto personal en su interpretación.

- La segunda (Theravāda), caracterizada por tener formas más ortodoxas.

- Y la tercera (Vajrayāna), relacionada con el budismo tántrico (mudras, dharanis, mandalas y mantras).

La siguiente religión con más seguidores es el sintoísmo o Shintō. Es la práctica religiosa menos conocida para el mundo occidental, ya que es originaria de Japón. Este conjunto de creencias se basa en respetar y venerar a la naturaleza y sus divinidades; como el sol, los arboles, el mar... Como coincide con diferentes pensamientos o filosofías, ha podido cohabitar con el budismo y otras religiones. Es por ello por lo que es habitual que en un mismo perímetro se encuentren templos budistas y santuarios sintoístas. Incluso hay personas que siguen ambas religiones.

Se encuentran unos 77.256 santuarios sintoístas a lo largo de todo el país. Se caracterizan, sobre todo, por una “puerta” llamada Torii, que conduce a un jinja. El término jinja es difícil de comprender, ya que en la actualidad se utiliza de forma informal para referirse a la edificación del santuario. Pero tradicionalmente su propósito consistía en consagrar y realizar cultos a una divinidad sintoísta y no en referencia a algo material. Uno de los santuarios sintoístas más conocidos es el santuario de Itsukushima, en la prefectura de Hiroshima.

Santuario de Itsukushima

El tercer puesto en cuanto a religiones con más seguidores se lo lleva el cristianismo, pero solo es seguida por el 1% de la población. Esta llegó al país en 1549, de la mano del jesuita español Francisco Javier y sus viajes por el territorio nipón. En un principio fue aceptada, pero unos siglos después fue prohibida durante unos 200 años hasta 1866 gracias a la restauración Meiji. Un ejemplo de iglesia cristiana en Japón sería la iglesia de Ōura, en la prefectura de Nagasaki.

Iglesia de Ōura

Por último, el judaísmo, con mucho menos del 1% de la población como practicante. Su entrada al país se remonta al siglo XVI, por la llegada de los comerciantes de procedencia holandesa y portuguesa. Actualmente se hayan dos sinagogas, una en Tokio y otra en Kobe.

Finalmente decir que la coexistencia de las distintas religiones es aceptada y respetada, no como en otros lugares; pero cada vez hay un número menor de creyentes y practicantes.

Comentarios

  1. Queda muy bien aquí en el blog, gracias Fernando!

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  2. Muchas gracias, Fernando, por dar soporte a esta novel escritora. Besos y abrazos, manteniendo la distancia.

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    1. ¡Gracias por comentar! Seguro que será el primer artículo de muchos :)

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